La Casa Blanca acaba de anunciar una jugada histórica liderada por el presidente Trump: el mayor recorte fiscal para la clase media en la historia de Estados Unidos.
Cero impuestos en propinas, pensiones de jubilación y horas extra son solo el comienzo de este cambio revolucionario. Con esta estrategia, Trump apunta hacia la eliminación de las ventajas fiscales injustas que por años han beneficiado a los multimillonarios. Es un paso necesario y valiente hacia un sistema económico más justo, donde el trabajador promedio finalmente recibe el respeto y apoyo que merece. Eliminar impuestos sobre ingresos adicionales como propinas y horas extra es una victoria directa para el trabajador estadounidense. Este plan fortalece el ingreso de familias trabajadoras, estimula la creación de empleo y empodera a quienes sostienen nuestra nación con su esfuerzo diario.