FBI investiga el encubrimiento del origen de COVID-19 mientras surge nueva cepa
En un desarrollo significativo que confirma lo que muchos conservadores han sospechado durante años, el subdirector del FBI, Dan Bongino, reveló el miércoles por la noche que la agencia federal está investigando activamente asuntos relacionados con el encubrimiento del origen del virus COVID-19. Esta revelación llega en un momento crucial, mientras informes sobre una nueva cepa del virus comienzan a circular en los medios de comunicación.
Bongino, quien ha sido una voz firme en la administración Trump sobre temas de seguridad nacional, compartió esta información a través de una publicación en la plataforma X (anteriormente Twitter), donde dejó claro que varias oficinas de campo del FBI están involucradas en esta investigación.
«A medida que leemos y procesamos informes sobre la aparición de una nueva cepa COVID, quiero que sepan que estamos investigando activamente, en varias oficinas de campo, el encubrimiento del origen de la COVID. El virus, junto con los asuntos relacionados que requieren nuestra atención», escribió Bongino. «El pueblo estadounidense merece respuestas.»
Esta declaración representa un paso importante en la búsqueda de la verdad sobre los orígenes del virus que paralizó al mundo entero. Aunque Bongino no especificó qué personas o entidades están bajo escrutinio, la mención de un «encubrimiento» sugiere que el FBI está investigando posibles acciones deliberadas para ocultar información crucial sobre cómo comenzó realmente la pandemia.
La teoría del laboratorio: De «conspiración» a hipótesis principal
Durante años, aquellos que sugerían que el virus podría haberse originado en un laboratorio en Wuhan, China, fueron ridiculizados y censurados en redes sociales. Sin embargo, el tiempo ha demostrado que la administración Trump tenía razón al cuestionar la narrativa oficial de un origen natural.
La CIA, que anteriormente se mostraba reacia a respaldar la teoría del laboratorio, cambió su posición en enero de 2025, concluyendo que el virus «probablemente» se originó en un laboratorio chino. Aunque la agencia admitió tener «poca confianza» en su conclusión, este cambio representa un giro importante en la narrativa oficial.
De manera similar, el director del FBI, Christopher Wray, había declarado ya en 2023 que el coronavirus «probablemente» se originó en un «laboratorio controlado por el Gobierno chino». Estas declaraciones respaldan lo que el presidente Trump y sus aliados han argumentado consistentemente desde el inicio de la pandemia.
La administración Trump: Firme en su postura desde el principio
A diferencia de la vacilación de muchos demócratas, la administración Trump ha mantenido una posición clara sobre el origen del COVID-19. Desde que regresó al poder, el presidente Trump ha reafirmado que la pandemia se originó en un laboratorio, una postura que ahora está respaldada por varias agencias de inteligencia.
En enero, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, declaró que la fuga de laboratorio es «la verdad confirmable», y los sitios web gubernamentales ahora presentan esta teoría como los «verdaderos orígenes» de COVID-19.
El equipo de Trump y gran parte del movimiento MAGA han sostenido consistentemente que el origen del virus está sin ninguna duda en un laboratorio y que China debe asumir su responsabilidad. Esta firmeza contrasta con la indecisión y las políticas contradictorias de la anterior administración demócrata.
La investigación en curso: Buscando responsabilidades
La investigación que Bongino ha revelado podría tener implicaciones de gran alcance. Si bien los detalles específicos siguen siendo escasos, el hecho de que múltiples oficinas de campo estén involucradas sugiere una investigación amplia y exhaustiva.
Es importante destacar que la aparición de una nueva cepa de COVID-19 hace que esta investigación sea aún más urgente. Si el virus original fue el resultado de experimentación de laboratorio y se permitió que se propagara debido a un encubrimiento, es fundamental determinar si los mismos actores podrían estar involucrados en este nuevo desarrollo.
¿Quién está bajo investigación?
Aunque Bongino no identificó a las personas o entidades específicas bajo escrutinio, varios funcionarios chinos y posiblemente incluso algunos funcionarios estadounidenses podrían estar en la mira del FBI. Durante años, ha habido preguntas sobre el papel del Instituto de Virología de Wuhan y su investigación sobre coronavirus de murciélagos, así como sobre la posible financiación estadounidense de dicha investigación.
El senador republicano Tom Cotton, presidente del Comité de Inteligencia del Senado, ha sostenido desde hace tiempo que el origen estaba en los laboratorios de Wuhan y ha aplaudido el cambio de criterio de la CIA. «Ahora lo más importante es hacer que China pague por desatar una plaga en el mundo», declaró Cotton.
La respuesta de China
Hasta el momento, China ha negado consistentemente cualquier responsabilidad en el origen de la pandemia y ha rechazado las acusaciones de que el virus se filtró de uno de sus laboratorios. Sin embargo, el gobierno chino también ha sido criticado por su falta de transparencia y por obstaculizar las investigaciones internacionales sobre los orígenes del virus.
La revelación de Bongino probablemente tensará aún más las relaciones entre Estados Unidos y China, que ya están en un punto delicado debido a disputas comerciales, preocupaciones de seguridad nacional y diferencias ideológicas.
El pueblo estadounidense merece la verdad
Como Bongino acertadamente señaló en su declaración, «el pueblo estadounidense merece respuestas». La pandemia de COVID-19 causó un daño incalculable a nuestra nación: cientos de miles de vidas perdidas, millones de empleos destruidos y billones de dólares en daño económico.
Si esta catástrofe fue el resultado de negligencia o, peor aún, de un encubrimiento deliberado, es fundamental que los responsables rindan cuentas. La administración Trump está demostrando una vez más su compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas, valores que han estado notablemente ausentes en gobiernos anteriores.
Mientras la investigación continúa, los estadounidenses pueden estar seguros de que, bajo el liderazgo del presidente Trump, no se escatimará esfuerzo en la búsqueda de la verdad, sin importar a dónde pueda conducir.
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Fuentes:
– FBI examinando COVID Bongino: «Encubrimiento» del origen del COVID-19
– La CIA cree que el virus del COVID-19 «probablemente» se originó en un laboratorio chino
– El COVID-19 pudo salir accidentalmente de un laboratorio, según el FBI
– Trump, el conservadurismo estadounidense y la Convención
